PARA BUSCAR EN NUESTROS BLOGS...

Mostrando entradas con la etiqueta DATOS SAJA NANSA. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta DATOS SAJA NANSA. Mostrar todas las entradas

martes, 26 de junio de 2012

"LOS MOROS" DE SAJA NANSA

Cambera de los Moros. San Vicente del Monte
Un rápido vistazo por la historia medieval de nuestra comarca nos lleva a asegurar que la presencia musulmana por el espacio Saja Nansa ha sido prácticamente nula, ya que este territorio, junto con la zona oriental de Asturias se mantuvo prácticamente impermeable a los avances de los conquistadores. Es más, en aquel periodo las pocas referencias de llegada de población relacionados con el avance omeya será la de los pueblos castellanos fronterizos que se ven empujados a cruzar los collados en busca de protección, abriendo algunas vías que alcanzarán importancia más adelante como la de los Foramontanos, los de fuera de la montaña. En cambio, resulta interesante la referencia de muchos lugares, tradiciones  y monumentos al término popular con los que se les conocía, los moros. Apenas hay un lugar en nuestra comarca Saja Nansa que no tenga cerca una cueva, una ruina o unas lastras que no anuncien la presencia mora.
Aunque reconocemos que hemos oído hablar de otros puntos que no sabríamos localizar, podemos hacer un repaso de alguna de las referencias más importantes en la comarca que presuponen una propiedad o industria de los conquistadores:
LA  CAMBERA DELOS MOROS. Calzada romano-medieval en la ladera de la Sierra del Escudo de Cabuérniga, a dos kilómetros de San Vicente del Monte, en Valdáliga.
LA BOLERA DE LOS MOROS. Restos de una fortaleza de vigilancia construida entre los siglos VIII y XI, cerca del pueblo de Piñeres en el municipio de Peñarrubia.
LA LLASCA DE LOS MOROS. Rampa de agua totalmente natural (aunque parezca obra humana) en las inmediaciones de Bustriguado, en Valdáliga.
CUEVA DEL MORO. Cueva famosa por sus grabados junto al río Guado, en las inmediaciones de San Mamés, Polaciones.
CUEVA DEL MORO CHUFÍN. Cueva con yacimiento y arte rupestre en la orilla del embalse de la Palombera, en la zona de Riclones, Puentenansa
LAS MORAS DE CARMONA. La mitología local adjudica este nombre  a las anjanas según la cultura carmoniega, de Rionansa.
Esta coincidencia toponímica se hace más evidente territorialmente cuando se añaden los casos lebaniegos: en Pendes, el Corral de los Moros; en Bedoya, el Molino del Moro; en Enterrías, los Corros del Moro; en Hoyo Cardoso el Tesoro del Moro; en Lebeña, la Cueva de la Mora; en Cahecho, la Cueva de los Moros; en Lon, el Hoyu Moru; en Argüebanes, la Cueva de los Moros; en Lamedo, la Fuente del Moro; en Bejes; Cueto Moro
No es una coincidencia que, en su mayoría, resulten ser lugares muy particulares que reflejan o intuyen la presencia y labor de una población antigua de la que tan sólo quedan restos, ya sean pinturas, grabados o ruinas. Es tradicional en otros puntos de la región, e incluso en otros puntos de la geografía nacional, adjudicar a los árabes el origen de los restos de monumentos históricos remotos, resultando, en líneas generales, dataciones mucho más antiguas que son ajenas a la intervención real de los musulmanes medievales.
Hay distintas interpretaciones de este hecho pero que en su suma, seguramente, sirvan para explicar la diversidad de los casos. Por ejemplo, el caso de Carmona y sus particulares moras, Guillermo Piquero señala el uso antiguo del término “moro” para señalar todo aquello que tiene un origen pagano o alejado de la común civilización: 

…” el origen del topónimo ’moro’ no tiene nada que ver con las personas del mundo musulmán. Para entender su origen basta con repasar la mitología de nuestros pueblos vecinos, en las que dicho término y sus variantes se aplican para definir a los primeros pobladores de sus tierras, que dejaron como testimonio algunos pocos dólmenes, túmulos y construcciones de piedra que han conseguido sobrevivir hasta nuestros días.
En Aragón, a los ‘moros’ se les identifica con una raza humana muy antigua, de gran estatura y fuerza, que construyeron los menhires y dólmenes pirenaicos. También en esa misma zona, se conoce como ’moras’ a las hadas que habitan en las montañas. En este mismo sentido, Manuel Llano recoge la tradición de Carmona y Puente Nansa de denominar ’moras’ a las anjanas.
Moro’ fue antaño sinónimo de pagano, y es muy probable que con la llegada del cristianismo, las gentes más reticentes a la “conversión” se refugiaran en lugares alejados y de difícil acceso, como así parece haber quedado reflejado en la toponimia. Esta identificación con lo pagano también derivo en calificar como ’moro’ a las personas que no habían recibido el bautismo cristiano.”

Otra teoría con un razonamiento que parece muy acertado es la que encuentra su explicación en la coincidencia etimológica entre el término propio de la zona mouro, aplicado a los muros de piedra y el adjetivo latino maurus, moreno, con el que las tropas romanas identificaban a los mauritanos. La cercanía terminó relacionándolos semánticamente, hablar de uno de ellos debió llevar a pensar en el otro término.
En esas explicaciones se debate el artículo que dedica  Palabra Habitada, Toponimia y Medio Ambiente, de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, cuando intenta explicar el caso concreto del Mirador del Moro

La segunda posibilidad, que aquí se sigue, vuelve la mirada a una hipotética raíz prerromana del tipo *MORR-, con el significado de “piedra, roca”. El léxico de Cantabria ofrece ejemplos que darían cuerpo a esta hipótesis, caso de moriazu, voz masoniega que significa “montón de pequeñas piedras”, y moruguetu, aplicada a los montones de hierba, de uso actual en Val de San Vicente y San Sebastián de Garabandal (Ayuntamiento de Rionansa).

Resulta evidente, por tanto, que esa referencia a los moros en nuestro territorio sirve como referencia y testimonio de un pasado remoto indistintamente de su origen. Otra característica propia de este fenómeno toponímico es su localización en las zonas interiores de los valles, por lo que, aprovechando una frase hecha, podríamos terminar diciendo que en Saja Nansa… “no hay moros en la costa

lunes, 16 de abril de 2012

LA LLUVIA EN LA COMARCA SAJA NANSA



En unos días tan lluviosos como los que estamos teniendo, una colaboración con los chicos de la web Meteosal nos han traído algunos datos muy interesantes sobre la distribución y magnitud de las precipitaciones en los últimos años con conclusiones muy interesantes… como que llueve tanto como antes , pero repartido en más días, hasta el punto que, como media, en Saja Nansa uno de cada tres días del año es de lluvia…

por Ruben Ruiz

Como ya sabemos, desde hace unos años hasta la actualidad, las lluvias no son regulares en la comarca Saja Nansa.
 Vamos a hacer una comparativa de los años pluviométricos y las posibles causas de porque fueron así:
 Se entiende como “precipitación” la caída hacia la tierra, procedente de las nubes, de todas las formas de agua líquidas o sólidas (lluvia, nieve, granizo, rocío…etc), aunque tan sólo la nieve y la lluvia contribuyen significativamente a los totales de precipitación.
 Los años 1991, 2000, 2006, fueron años pluviométricamente hablando muy bajos, ya que se registraron 635 l/m2, 898 l/m2, 904 l/m2.


 Curiosamente, en los dos primeros años el número de días de precipitación es acorde con la poca pluviosidad anual, ya que fueron 57 y 69 respectivamente. En cambio en el año 2006 el número de días fue de 106 días de lluvia.
 La explicación es que  en los meses de más lluvia que son entre Abril y junio, y Septiembre y Diciembre, en los dos primeros años hubo un dominio de circulación zonal de oeste a este de borrascas, con vientos dominantes de componente Noroeste los cuales en pocos días y horas dejan bastante precipitación. Aun así hubo en general un dominio anticiclónico azoriano, por lo que las precipitaciones no fueron cuantiosas.
 En el 2006, la situación fue muy parecida pero a diferencia de los dos años anteriores, este año hubo mucha afluencia de vientos de componente Norte, los cuales suelen favorecer episodios lluviosos, pero en bastantes ocasiones no vienen acompañados de inestabilidad a niveles medios y altos de la atmósfera, por lo que aunque el número de días de lluvia sea mayor, las cantidades recogidas no son excesivamente altas tampoco.
 Además éstas circunstancias suelen venir por un dominio anticiclónico severo, y régimen de vientos del Norte, impidiendo la circulación normal de borrascas o corriente de Coriolis y obligando a éstas a afectar al norte y este de Europa.
 Por el contrario, en los años 1995, 1998, 1999, 2002, 2003, 2007 por ejemplo, el número de días de lluvia fue bastante normal, rondando los 50-70 días de lluvia, excepto en el 2007 donde fueron 118 días de lluvia.
 Estos años fueron de precipitación normal ya que rondaron los 1200 l/m2 en la comarca Saja Nansa. En el año 2007 fue especialmente lluvioso en los meses de Invierno de Septiembre a Diciembre debido a la influencia de vientos de componente Noroeste.
 Destacamos como años más lluviosos de la serie de 1990 a 2010, el año 1992 y el año 2008.
 Sobre todo este último con 1622 l/m2 y 133 días de lluvia fue especialmente lluvioso. Esto ocurrió porque el anticiclón azoriano estaba muy al Sur y dejó paso a borrascas atlánticas las cuales como ya hemos dicho traen mucha humedad y lluvia a Cantabria en general y a la comarca Saja Nansa en particular.
 Por último destacar que en los últimos años de la serie las precipitaciones han sido bastante cuantiosas, coincidiendo sobre todo con los meses estivales. En cambio, en 2011, ha sido un año seco en líneas generales, con un acumulado anual de 1100 l/m2 coincidiendo con unos meses de lluvias en las que éstas brillaron por su ausencia…

jueves, 22 de marzo de 2012

MUJERES: UN VALOR DE ESTABILIDAD EN EL MEDIO RURAL

La segadora, Millet, 1857
Si existe un fenómeno social interesante y claramente expresivo de la importante transformación de la sociedad rural tradicional es el aumento de la masculinización de la población en el medio rural: existe una correspondencia directa y clara entre los procesos de despoblación y el porcentaje de mujeres en ese territorio. En los casos en los que la actividad económica es evidente y se goza de un mejor acceso a los servicios o donde la población se mantiene o aumenta, el porcentaje de mujeres suele ser alto, equilibrado con el de los hombres, o sea, que suele acercarse al 50% e incluso superarlo. Aunque las cifras aún queden lejos de posturas extremas, los datos que aporta la comarca Saja Nansa son son una verdadera ejemplar de ese tipo de circunstancias. Analizarlo podría aportarnos nuevas claves para entender mejor la coyuntura de nuestro territorio y, por tanto, estar un poco más cerca de las soluciones que demanda.
En una sencilla revisión de los datos podemos encontrar un lento proceso que ha marcado diferentes etapas. Si bien en los años 50-60, con la llegada de la industrialización generalizada al país, supuso una migración de hombres hacia los espacios urbano-industriales del ámbito nacional y europeo con la consiguiente feminización de la población rural, no tardó en desacelerarse esa tendencia hasta llegar al escenario contrario de un mayor abandono de los pueblos por parte de las mujeres.
Este proceso mantiene una vigencia ejemplar en nuestro territorio comarcal, cumpliendo en todos los casos la lógica del fenómeno.

(puedes ver la tabla en mejor definición clickando en la imagen)

La comarca, como ya comentamos en otra ocasión, crece durante la última década, y lo hace en mayor proporción en el género femenino: mientras que la población masculina crece en 341 individuos entre 2001 y 2011, las mujeres suman 461. Se cumple por tanto la fórmula de que mejora la población = mejora el porcentaje femenino.
En el análisis municipal esta fórmula se convierte en una verdadera constante. Sólo hay un municipio en el que haya mayor número de mujeres que de hombres, Cabezón de la Sal, con un 51%, y cumple plenamente la lógica por tratarse del municipio que más población absorbe y uno de los más importantes núcleos económicos y de servicios del territorio.
En el otro extremo se encuentra Tudanca, con el porcentaje de mujeres más bajo, apenas supera un 30 %, y uno de los casos más delicados del territorio en los procesos de descenso de la población e inactividad socioeconómica. Si tomamos como referencia alguno de los municipios que muestran en los últimos años un mayor crecimiento de población, como Mazcuerras o Val de San Vicente, o aquellos que tienen mejor accesibilidad a los servicios como San Vicente de la Barquera, vemos que, de nuevo, muestran los más equilibrados porcentajes de mujeres y hombres, y que además, han reaccionado hacia el ascenso en los últimos años.
Si buscamos entre los expertos algunas explicaciones para este fenómeno encontramos la descripción de escenarios que nos son fácilmente reconocibles. La sociedad y la economía rural tradicional basa su estructura principal en el desarrollo agrario, y éste a su vez está determinado por la titularidad de la tierra y por los avances sufridos en el último periodo histórico con la permanente modernización de los medios de explotación. En este contexto el protagonismo es contundentemente masculino, dejando a la mujer un papel secundario reducido a las labores menos reconocidas de mantenimiento del hogar y la familia. Éste es el motivo de que los hombres permanezcan mucho más en sus pueblos de nacimiento, mientras que son las mujeres las que terminan trasladándose al pueblo de la pareja o el marido.
También existe una causa relacionada con el ámbito educativo. Mientras que el hombre joven tiende a abandonar los estudios porque queda prematuramente ligado a la explotación y se le plantea la responsabilidad de su continuidad, el papel de “ayuda familiar” de la mujer joven (que ya cuenta con el sacrificio de las madres) les supone, en muchos casos, alargar más que los chicos su proceso formativo, con el objetivo de buscar un futuro fuera del medio familiar. El distanciamiento durante su proceso de formación y la prematura incorporación al mercado de trabajo, puede suponer una desvalorización de lo agrario y rural, lo que conlleva una mayor predisposición migratoria hacia los pueblos más grandes o el medio urbano, y termina apareciendo en su imaginario como la única alternativa que le permite superar el papel desestimable del modelo tradicional.
Otro aspecto que corre en favor de la marcha de muchas mujeres del medio rural en edad joven, entre los 20 y 30 años, es su especial valorización de aquellos lugares que presentan  mejores instalaciones sanitarias, educativas o culturales.
No es de extrañar, por tanto, que en cualquier planteamiento de desarrollo rural sea especialmente sensible al ámbito de las mujeres, no sólo por mejorar y compensar una situación social que arrastra la inercia histórica, sino porque premiar la inclusión de la mujer en un nuevo concepto rural supone sentar las bases para una situación más estable de la población.

miércoles, 7 de marzo de 2012

LEYENDAS URBANAS


 La idea de que la crisis podía ser un aliciente para que la población inmigrante haya decidido volver a sus pueblos de origen, con la intención de alcanzar la autarquía de una vida sencilla, se ha generalizado en la calle y entre los contenidos de algunos medios, pero no parecen tener un reflejo claro en la estadistica de nuestra comarca, al menos de momento...

Si analizamos los datos desde 2005 encontramos que, efectivamente el paro ha sido un verdadero castigo para todos y cada uno de nuestros municipios, fueran del tipo y lugar que fuesen. Todos los municipios de Saja Nansa han duplicado en los últimos años su tasa de paro, y algunos han llegado a superarla en tan sólo 5 años un 400%. No necesitamos más demostraciones para asegurar que esa otra imagen de que la crisis ha hecho menos mella en el medio rural también se nos diluye en la realidad: el empleo siempre fue un elemento determinante para la recepción o perdida de población, pero en estos años el paro ha ascendido en nuestra comarca una media del 270 %.
Cumplimos, por tanto, con un contexto claro afectado por la crisis, y ahora tendríamos que mirar como ha reaccionado la población a esta situación. El primer referente que tendríamos que tener en cuenta es el crecimiento natural de nuestros municipios en este periodo para  poder entender mejor los números finales.

 
En el cuadro que analiza el crecimiento vegetativo de la comarca, la tendencia natural de la población a crecer o disminuir mediante el recuento sencillo de sus nacimientos y defunciones, presenta unas cuentas claramente negativas: la capacidad de repuesto de la población por sí misma es negativa, hay más defunciones que nacimientos. En el periodo seleccionado, entre 2005 y 2010, las cifras positivas de crecimiento natural son la excepción. Los datos totales de la comarca nos llevarían a una perdida de población de 309 vecinos durante ese periodo, teniendo a Rionansa, Valdáliga y Cabuérniga como los municipios con un descenso mayor, y a Cabezón de la Sal y Udías como los dos únicos datos de valor positivo: en estos dos municipios la población crecería por sí misma.
Los municipios pequeños muestran la misma tendencia a disminuir, aunque su cifras relativas sean menores (algunos descenderían casi un 10%), marcados por una población muy envejecida que presenta pocos nacimientos y un importante número de defunciones.
En cualquier caso es curioso comprobar que todos los municipios, sin excepción, tienen periodos de crecimiento y descenso durante ese periodo.


Pero si, finalmente, miramos las cifras absolutas que nos aportan el ICANE para el periodo que va de 2005 a 2011 vemos que la comarca Saja Nansa remonta las cifras de descenso propias del crecimiento natural hasta llegar a contar con 108 vecinos más en este periodo. En el ámbito de los municipios encontramos 6 de ellos en el que el resultado es de claro crecimiento, y en todos los demás (salvo en dos casos) sus datos de crecimiento, aunque negativos, mejoran los datos de su crecimiento natural con la llegada de nuevos vecinos desde el exterior. Algunos municipios, como Ruente, Mazcuerras o Val de San Vicente remontan un crecimiento vegetativo negativo para mostrar una pauta de claro aumento que llega a superar en algún caso a los que su crecimiento natural se mostraba firme.
Es evidente que en sus números absolutos la comarca Saja Nansa aún mantiene los suficientes ingredientes de interés para seguir creciendo a pesar de los duros momentos de la economía y el empleo, pero la tendencia, no parece ser, ni mucho menos, un movimiento significativo de retorno, ya que, al fin y al cabo, los mayores crecimientos parecen atender más a la cercanía de los servicios y las comunicaciones que a un interés por recuperar el medio rural más tradicional, que se sigue mostrando con una delicada situación de perdida poblacional.

miércoles, 15 de febrero de 2012

UN TERRITORIO... MUY PROTEGIDO

El valor natural de Saja Nansa es indiscutible. Su difícil geografía ha dificultado un uso más común de su superficie, pero a cambio, ha permitido la conservación de parajes de muy alto valor ecológico. La comarca Saja Nansa, tiene un porcentaje de superficie protegida que supera el 44% de su superficie total. Con este porcentaje Saja Nansa se convierte en la comarca rural que más superficie protegida presenta de Cantabria y la que más figuras de protección posee en su territorio, hasta 5 diferentes en un total de 14 espacios protegidos.

Hay figuras que sólo afectan a espacios muy limitados y definidos en municipios concretos, como el Área de Protección del Oso Pardo reducido a un pequeño espacio de Polaciones, las 2 hectáreas del Monumento Natural de las Secuoyas en Cabezón de la Sal, o el amplísimo espacio subterráneo de la Cueva del Rejo en Val de San Vicente para la protección de los murciélagos. Los espacios más importantes en extensión corresponden a los 2 Parques Naturales, Oyambre y Saja Besaya, los 7 espacios LIC y las 3 zonas ZEPA.

Desde la perspectiva municipal encontramos 5 municipios que tienen un porcentaje muy alto (más del 50%) de superficie protegida. Polaciones con un 100% protegido, y Los Tojos con un 90%, situados en la zona sur de la comarca, son los que cuentan con más porcentaje de superficie protegida con respecto a la superficie municipal, seguidos de San Vicente de la Barquera y Peñarrubia con alrededor del 70% de su superficie, y de Tudanca con un 65%. En la mayor parte de ellos la zona protegida supera el 20%.

El territorio de muchas de las distintas figuras y espacios de protección se solapan, haciendo que una gran parte de los 453 km2 protegidos lo estén bajo varias figuras. Si comprobamos el cuadro de los espacios y los municipios cuyo territorio se ve afectado, vemos que Peñarrubia, Polaciones o Val de San Vicente aparecen en 5 ocasiones, y que Tudanca o Los Tojos lo hacen 4 veces.

El listado de espacios y municipios afectados es amplio:

Parque Natural Saja Besaya. 24500 ha. Los Tojos, Ruente, Cabuérniga, Campoo de Suso, Cieza y Arenas de Iguña.

Parque Natural de Oyambre. 5700 ha. Val de San Vicente, San Vicente de la barquera, Udías, Valdáliga y Comillas.

Monumento Natural de las Secuoyas. 2,5 ha. Cabezón de la Sal


RED NATURA: Lugares de Interés Comunitario (LIC)

Valles Altos del Nansa, Saja y Alto Campoo. 51000 ha. Cabuérniga, Lamasón, Peñarrubia, Polaciones, Ruente, Los Tojos, Tudanca, Cieza, Comunidad Campoo-Cabuérniga, Campoo de Suso y Arenas de Iguña,

Sierra del Escudo de Cabuérniga. 782 ha. Valdáliga.

Rías Occidentales y Duna de Oyambre. 1272 ha. Val de San Vicente, San Vicente de la Barquera, Valdáliga y Comillas.

Liébana. 42500 ha. Peñarrubia, Potes, Tresviso, Camaleño, Vega de Liébana, Pesaguero, Cillórigo y Cabezón de Liébana.

Río Deva. 397 ha. Peñarrubia, Val de San Vicente, Vega de Liébana, Cillorigo, Camaleño, Pesaguero, Cabezón de Liébana, Potes

Río Nansa. 561 ha. Rionansa, Lamasón, Herrerías, Tudanca, Val de San Vicente

Río Saja. 321 ha. Cabuérniga, Ruente, Los Tojos, Cabezón de la Sal, Mazcuerras, Comunidad Campoo, Cabuérniga

RED NATURA: Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA)

Desfiladero de La Hermida. 6350 ha. Peñarrubia, Cillorigo.

Sierra Peña Sagra. 5020 ha. Rionansa, Polaciones, Lamasón, Tudanca, Peñarrubia, Cillorigo, Cabezón de Liébana.

Sierras del Cordel y cabeceras del Nansa y Saja. 16200 ha. Comunidad

Campoo- Cabuérniga, Tudanca, Los Tojos, Polaciones, Hermandad Campoo de Suso

RED NATURA: Conservación de Murciélagos

Cueva del Rejo. 180 ha. Val de San Vicente

lunes, 12 de septiembre de 2011

LOS BUENOS RESULTADOS DE LA FERRERÍA DE CADES

de JAMS

Desde su apertura en el año, la nueva propuesta cultural y educativa de la Ferrería de Cades no ha hecho más que crecer al mismo ritmo que sus mejoras. Con la rehabilitación del molino y su preparación para la muestra de funcionamiento, el complejo de la Ferrería está alcanzando durante este año sus mejores cifras de visitantes: 7475 personas han pasado ya en lo que llevamos de año por sus instalaciones, superando en un 6% las cifras del 2010. Aún así, en las previsiones que la Asociación de Desarrollo Rural Saja Nansa ha calculado para este 2011 aún cabe un margen de mejora que puede ascender hasta el 10% a finales de año.

Desde el presente año la oferta para su visita intentaba adaptarse a los intereses de todos sus visitantes, y para ello se ofrecían distintos tipos de visita ajustados a los elementos del complejo, a su funcionamiento y a todas las economías. Ha sido muy interesante comprobar que Cades ya cuenta con un complejo hidráulico que despierta de forma importante el interés de sus visitantes, ya que más del 85% de ellos han elegido la visita completa de molino y ferrería con sus respectivas demostraciones de funcionamiento.

Su permanente atención a los visitantes y al alcance turístico de su propuesta ha llevado a la ADR Saja Nansa, que gestiona su funcionamiento, a poner en marcha sistemas de recogida de información sobre las visitas. El dato más significativo señala que más de un millar de esas visitas provenían de la Comunidad de Madrid, un 27% del total; siguiéndole en importancia Castilla y León (13 %), Cantabria (13%) y Cataluña (11%)

A partir de septiembre la actividad continúa en Cades mediante el inicio de la campaña de ocio educativo que la ADR Saja Nansa programa cada otoño en la Ferroteca. Más de un millar de escolares han visitado ya los diversos talleres planteados para los distintos niveles escolares acerca de aspectos ambientales del bosque de ribera, de la prehistoria y de los diferentes oficios que se desarrollaron alrededor del funcionamiento de la Ferrería de Cades. La nueva campaña escolar se iniciará con los itinerarios guiados Los Ingenios del Agua, que, entre el 5 de octubre y el 10 de noviembre próximos, mostrarán el funcionamiento de ferrerías, molinos y centrales hidroeléctricas.

Este proceso continuado de funcionamiento Ferrería y Ferroteca a lo largo del mayor espacio posible del año es un elemento fundamental para la sostenibilidad del proyecto, y además, incide directamente en la dinamización del territorio que encuentra en todas estas actividades un flujo importante de visitantes a la zona.

jueves, 21 de julio de 2011

RENTA BRUTA DISPONIBLE










(pincha sobre la imagen para visualizar la tabla)
BDH. Elaboración propia fuente INE.

César Aja.

De la tabla anterior es necesario destacar que la tasa de crecimiento de la renta percápita por habitante entre el periodo 2002-2008 en la Comarca Saja-Nansa es mayor que la existente
en el conjunto de la Comunidad Autónoma de Cantabria. Siendo en la Comarca Saja-Nansa de un 37,97% y de un 36,25% para la Comunidad Autónoma de Cantabria. Aunque la tasa de crecimiento de la renta percápita por habitante en los hogares del Saja Nansa es mayor sí es cierto que la renta es menor que la media, esto significa que en conjunto existe una tendencia muy leve a la disminución de la brecha de la renta en la Comarca Saja -Nansa con respecto al conjunto de la Comunidad Autónoma de Cantabria.
Por otro lado, esta convergencia en su conjunto, no implica que la distribución interna de la renta haya aumentado, es necesario estudiar los movimientos demográficos, dado que estos parecen indicar el asentamiento de familias con un nivel de renta mayor principalmente en zonas cercanas a los municipios más desarrollados, como Torrelavega y Santander. Un ejemplo de ello parece ser Mazcuerras el cual tiene una tasa de crecimiento de la población entre el 2002 y 2008 de un 8,91%, y en cambio la tasa de crecimiento de renta percapita es del 59,19% En el polo opuesto esta Los Tojos, la tasa de crecimiento de la población en la serie estadística 2002-2008 es de 7,16%, y la tasa de crecimiento de la renta percápita por habitante es del 30,47%.