¿Cuéntanos brevemente qué es y cuál ha sido la razón que ha provocado la aparición de esta OPHIC? La Oficina de Participación Hidrológica de Cantabria (OPHIC) surgió en el año 2006 como una más de las iniciativas que desde el CIMA se estaban impulsando en el marco de la participación ciudadana, la educación ambiental, el voluntariado, la comunicación, etc., con el objetivo de hacer posible una Cantabria más responsable ambientalmente y, en definitiva, más sostenible.
Desde su creación, la OPHIC asumió la responsabilidad de canalizar el proceso de información, consulta y participación pública asociado a la implantación de la Directiva Marco del Agua en nuestra región, tratando de alcanzar el mayor consenso posible entre los agentes implicados sobre los contenidos de los futuros Planes Hidrológicos. Con el tiempo, creo que nos hemos convertido en una ventanilla abierta al ciudadano, siempre cercana al territorio y a las personas, y que ejemplifica de alguna manera un nuevo modelo de gestión, más transparente y participativa.
Cabe destacar al apoyo político que siempre ha tenido esta iniciativa, y pienso que ese apoyo ha sido fundamental para mantener la intensidad y la ilusión con la que hasta ahora hemos trabajado.
¿Su objetivo era sólo consultor? ¿Cuál ha sido el protocolo que va de la convocatoria de los foros hasta los futuros Planes de Demarcación Hidrográfica? ¿En qué punto nos encontramos?
Sí, nuestra labor es la del intermediario que recoge las opiniones de la sociedad y las traslada a las administraciones competentes, fundamentalmente a las Confederaciones Hidrográficas competentes (el territorio de la comarca Saja-Nansa pertenece a la Demarcación Hidrográfica del Cantábrico Occidental).
Después de cada reunión, foro, etc., hemos desarrollado un trabajo quizás menos visible y agradecido pero sin duda también indispensable, como es el tratamiento de los resultados. A partir de las propuestas recogidas en los procesos participativos, se han elaborado fichas de actuación, que finalmente se han transmitido a las Confederaciones para su inclusión en la documentación de los Planes Hidrológicos. Cabe destacar en esta fase la colaboración de los expertos del Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria.
Actualmente, el proceso de planificación se encuentra en una fase crucial, próximo ya a su final, y de hecho, el borrador del Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Cantábrico Occidental está expuesto a consulta pública durante un plazo de 6 meses. Por nuestra parte, recientemente hemos concluido un ciclo de reuniones en todas las cuencas de Cantabria, precisamente para explicar a la población el estado del proceso de planificación, además de contar lo que se ha hecho con la ingente información previamente recogida en la fase de participación activa.
¿Cuánto tiempo os ha llevado recorrer todos los valles cántabros? ¿Has echado cuentas de cuántas convocatorias y reuniones con la población habéis realizado, aproximadamente? La fase de participación activa, sin contar la última ronda de retornos de los resultados, duró casi 3 años, en los que recorrimos todos los rincones de Cantabria, y tuvimos la oportunidad de hablar y compartir con miles de personas a quienes tenemos que agradecer de forma muy sincera su tiempo y su confianza. Sin duda, ha merecido la pena el esfuerzo realizado.
En todo ese tiempo, se desarrollaron 10 procesos participativos en todas las cuencas de la región (enunciadas por el orden cronológico de celebración de cada proceso): Ebro, Pas-Pisueña, Saja-Besaya, Miera, Campiazo, ríos internos de Castro Urdiales, Escudo y ríos costeros occidentales, Asón, Agüera, Nansa, Deva, y Camesa. Además de realizar multitud de visitas y reuniones informales, salidas de campo, encuestas, etc., hemos organizado 80 actividades de participación, entre las que se encuentran jornadas informativas, Foros del Agua, mesas sectoriales, mesas intersectoriales, etc.
¿Con tu experiencia particular cómo definirías la PARTICIPACION en Cantabria Con la perspectiva de estos 5 años de trabajo, y haciendo balance de nuestra trayectoria, creo que se ha demostrado que los cántabros son participativos en general, aunque hay que saber encontrar el canal de comunicación más eficaz en cada caso porque es cierto que nuestra sociedad tiene cierto déficit de cultura participativa. Hay que tener en cuenta también que hablamos de iniciativas novedosas, y que la administración parte de cierto descreimiento por parte de la población, en mi opinión totalmente justificado.
Considero que este trabajo es bastante especial, ya que requiere una gran implicación personal, y también capacidad de trabajo y de gestión de conflictos, pero proporciona grandes satisfacciones al percibir la confianza y el agradecimiento de la gente, y comprobar los cambios que poco a poco se van produciendo.
Ahora mismo creo que se está trabajando en sentido correcto, y tanto la Consejería de Medio Ambiente como otros departamentos del Gobierno de Cantabria están fomentando la participación de toda la sociedad. Por ejemplo, me gustaría poner en valor el magnífico trabajo de la Red Local de Sostenibilidad de Cantabria, ya que gracias al esfuerzo compartido de las entidades locales se está implantado la cultura de la sostenibilidad en los distintos ámbitos de la administración local.
¿Es sensible la población al medio que habita?
En mi opinión, la sociedad está cada vez más concienciada en cuanto al respeto del medio ambiente, y se percibe un cambio sustancial en las actitudes y conductas de la ciudadanía. No soy tan viejo, pero tampoco nací ayer, y echando la vista atrás considero que en los últimos 10 años ha mejorado mucho tanto la calidad ambiental de los ríos de Cantabria como el comportamiento de la sociedad hacia los mismos. No obstante, nos queda aún mucho camino por recorrer, y más si nos comparamos por ejemplo con los países del centro o norte de Europa.
En estos años de trabajo por todas las cuencas de Cantabria, he llegado a la conclusión de que la población es mucho más sensible, e incluso tiene un sentimiento de identificación con el medio mucho más fuerte, en el medio rural que en el medio urbano. En el medio rural la relación con el territorio y con los recursos en mucho más intensa, más física, y eso se ha manifestado en los procesos participativos de forma notoria. Cuando alguien nos decía “Yo pesco siempre en el Deva”, o “Yo soy del valle del Nansa”, se percibía un orgullo y una identificación con el medio muy difícil de encontrar en otras zonas más urbanas.
¿Cómo ha sido la experiencia en los Foros de la comarca Saja Nansa? ¿Había grandes diferencias con las otras comarcas? ¿Y existen diferencias entre los distintos valles de Saja Nansa?
La experiencia en vuestra zona ha sido de lo más gratificante, recuerdo como muy entrañables, y al mismo tiempo, fructíferos, los encuentros celebrados en localidades como La Hermida, Unquera, Puente Pumar, Puentenansa, Bielva, Carmona, Treceño, San Vicente de la Barquera, Terán de Cabuérniga, Cabezón de la Sal, etc.
Está claro que cada comarca, cada valle, cada cuenca, tienen su idiosincrasia y sus particularidades. Siempre habrá puntos comunes, pero los problemas y las potencialidades son muy específicas en cada lugar, como se ha manifestado en las distintas reuniones que hemos celebrado en vuestro territorio. El estado general de los ríos de la comarca Saja-Nansa es bastante bueno, y considero que quizás el principal activo de este territorio sea precisamente su excepcional paisaje y su patrimonio cultural, al que hay que poner en valor y potenciar al máximo, como creo que ya se está haciendo de forma acertada.
Al mismo tiempo, dentro de vuestro territorio, y ahí radica su gran riqueza, podemos encontrar un amplio abanico de realidades ambientales y sociales. Poco tienen que ver, por ejemplo, las realidades que podamos encontrarnos en Polaciones, Lamasón, o Los Tojos, con las de Val de San Vicente o San Vicente de la Barquera. Nosotros hemos intentado transmitir siempre el concepto de cuenca integral, ya que todo lo que hagamos en la cabecera de la cuenca va a tener su repercusión en el resto de los tramos, incluyendo el estuario y las aguas costeras.
¿Qué destacarías de los resultados que se han obtenido en nuestra zona?
Como decía antes, cada valle y cada cuenca son un pequeño mundo, y las realidades, los problemas, y la percepción social de los mismos, varían bastante. Sintetizando mucho las realidades de cada cuenca, creo que en la cuenca del Nansa está muy caracterizada por los aprovechamientos hidroeléctricos, la cuenca alta del Saja es una de las joyas naturales de nuestra región, la cuenca del Escudo presenta la dualidad del mundo ganadero en la cabecera y el urbanismo y turismo de la franja costera, y la cuenca baja del Deva presenta la peculiaridad de los usos lúdicos y actividades en el río.
Aunque ha pasado relativamente poco tiempo desde las reuniones, ya se están notando las mejoras en la calidad ambiental de vuestros ríos, entre las que destacaría el Saneamiento de las Tinas (rías de Tina Mayor y Tina Menor), la infinidad de actuaciones de saneamiento y abastecimiento en la práctica totalidad de municipios, y los importantes avances producidos en la cuenca del Nansa a partir de los acuerdos firmados con Acciona como titular de los aprovechamientos hidroeléctricos.
Según lo que habéis ido recogiendo en este proceso ¿Cuál es, en general, la idea que tiene la población del ámbito del agua y de su gestión?
Vamos a ver, as conclusiones son muy amplias y complejas como para resumirlas en unas líneas, pero sin duda creemos que esta apuesta por la participación social de base ha merecido la pena, ha sido un trabajo intenso y agotador, pero creemos que ha merecido la pena, porque la respuesta de la sociedad ha sido extraordinaria y hemos puesto nuestro granito de arena para que la gestión de la administración cada vez sea más cercana y transparente.
Como comentaba antes, las sensibilidades y las percepciones cambian mucho de una zona a otra, depende también del grupo social y del grado de interés directo que haya respecto del agua, etc. Pienso que en general la ciudadanía tiene una opinión favorable respecto de la gestión del agua en nuestra región, hay que tener en cuenta también que los ríos despiertan en las personas sentimientos afectivos, culturales, etc.
Recuerdo que una de las demandas que se han repetido en todos los procesos participativos ha sido la importancia de que las distintas administraciones con competencias sobre los ríos se coordinen entre sí y unifiquen sus criterios. Creo que el mensaje de la población es claro: quiere una administración ágil y eficiente que dé solución a los problemas reales.
No quisiera terminar sin agradecer muy sinceramente a todos los participantes en nuestras reuniones de las comarca Saja-Nansa su tiempo y su confianza, y muy especialmente a la Asociación de Desarrollo Rural Saja-Nansa y a los Ayuntamientos que la componen ya que su colaboración fiel y desinteresada nos hacen las cosas muy fáciles siempre que vamos a vuestro territorio. Nos vemos pronto.